The woe, I now believe, was that Lax could not state his bliss; / his love of the world and all things, all persons in it.
(Mark Van Doren)
“Lax”, escribe Paul J. Spaeth, editor de The Hermit’s Guide to Home Economics (New Directions, 2015), “en cierto modo se retiró, o apartó, de la sociedad pero al hacerlo en ningún momento se recluyó de la imaginación”. Pocas definiciones más acertadas para la personalidad y la obra de uno de los poetas usamericanos del siglo XX más desconocidos, Robert Lax.
Lax nació en 1915 en Olean, una pequeña ciudad del estado de Nueva York, a la que regresaría ochenta y cinco años después para morir en su casa familiar en paz. Su biografía incluye trabajos en The New Yorker y Time, los dos extremos del espectro y en ambos como editor de poesía, la parisina en lengua inglesa New Story o una breve estancia en Hollywood como guionista, labores que compaginaría con la docencia. Su lista de amigos es casi tan variopinta como sus trabajos e incluye al pintor Ad Reinhardt, al beat Kerouac o al trapense Thomas Merton.
En 1941 con el monje visitarían para trabajar como voluntarios durante dos semanas en la Catherine Doherty’s Friendship House en Harlem. Ahí probablemente comenzó la aventura espiritual y de una voz propia en la poesía de Lax que acabaría por convertirse al catolicismo en 1943. Su propia búsqueda le llevó al deseo una vida cada vez más sencilla y acabó por unirse a varios circos itinerantes como clown y malabarista. La gira de circo de los hermanos Cristiani le inspiró el primero de su grandes libros The Circus of the Sun en que equiparaba la experiencia circense y la creación del mundo.
Aunque publicara más bien poco no dejaría de escribir en toda su vida llevando cada vez más su poesía a una simpleza casi monosilábica y repetitiva para limpiar de impedimentos verbales la relación entre el mundo interior y el exterior. Buscando un lugar de paz en 1962 se mudó a Grecia, primero a Kalymnos y después a Patmos donde pasaría casi el resto de toda su vida. Ese retiro se debió principalmente a que el poeta necesitaba “ponerse en un sitio en el la Gracia pudiese fluir”.
Apenas saldría de su exilio, interior y exterior, salvo en contadas ocasiones como cuando recibió en 1969 el premio del National Council of the Arts o cuando en 1990 recibió el doctorado honoris causa de la St. Bonaventure University, la universidad que tiene en sus fondos la mayoría de los papeles de Lax. La última vez que salió de Patmos en el 2000 para regresar, por barco ya que no podía viajar en avión, a su natal Olean donde murió el 26 de septiembre.
At Night es un libro extraño dentro de una obra extraña. Publicado póstumamente como una de las secciones de A Hermit’s Guide to Home Economics (New Directions, 2015) es el ejemplo perfecto de la minimalización de la poesía a la que cada Lax se acercaba más.
Lax, si hubiera que defenderlo más allá de su poesía, si hubiera que explicarlo, tal vez sea uno de los pocos poetas que logró ese ideal a que todo poeta, todo escritor aspira: lograr una unidad entre el mundo y su escritura, entre el alma (cómo le hubiera gustado esa palabra) del escritor y la del lector. O como él mismo escribió en un poema: there is no end to the song and no beginning / the singer may die / but the song is forever // truth is the name of the song / and the song is truth.
José Luis Justes Amador
–
–
DE NOCHE
de
noche
un
sol
oscuro
brilla
en
el
mar
&
lo
calma
negros
calamares
gigantes
en
el
mar
sus
brazos
se
estiran
&
aquietan
las
olas
la luna
& la nube
el
oscuro
acró
bata
á
ra
be
se para
sobre
sus
manos
su
pálida
esposa
de
oro
está
junto
a él
&
a
plaude
du
dando
por
el aire
de
invierno
el
mirlo
ha
cia
el
asidero
con
noticias
del
cielo
hasta
mi
te
jado
en
un
torrente
to
da
cae
la
lluvia
–
AT NIGHT
at
night
a
dark
sun
shines
on
the
sea
&
calms
it
black
giant
squats
in
the
sea
his
arms
out
stretched
&
quiets
the
waves
moon
& cloud
the
dark
a
rab
a
cro
bat
stands
on
his
hands
his
pale
gold
en
wife
stands
near
him
&
ap
plauds
fal
ters
through
win
ter
air
black
bird
to
ward
foot
hold
with
news
from
the
sky
to
my
roof
top
all
in
a
tor
rent
falls
the
rain
–
–
–
Traducción de José Luis Justes Amador para Buenos Aires Poetry, 2021.